Me pasa la Leno esta curiosa galería de fotos bautizada como Anti-sites. En ella se pueden ver lugares que han sufrido modificaciones para evitar… ¿gente? En algunos sitios se ponen verjas para que los indigentes no monten su «chiringuito», otros sitios colocan pinchos para que la gente no se pueda sentar y algunos, sencillamente, son como murallas inexpugnables. Me parece realmente curioso, por llamarlo de alguna manera, que un ayuntamiento se devane los sesos hasta encontrar una manera de hacer inservible un recodo de su propia ciudad. ¿No se supone que su labor es precísamente la contraria?
Actualización
La Lechuga comparte esta impresionante foto tomada en Londres. Si uno se fija con atención, puede que observe alguna reminiscencia de ritos medievales en ella.